Despidiendo a un amigo

Que raro me suena todo esto. Tener que hablar de alguien que hace apenas unos días estaba a full con todos sus proyectos y saber que se nos fue. Siempre que alguien pasa a mejor vida, la costumbre es recordarlo como un buen tipo, por mas que haya sido tremendamente jodido.. No es el caso de Ruben Dario Barrios. Periodista deportivo, empleado judicial, ex estudiante de abogacía, y por supuesto conductor y productor de radio y tv. Un tipo muy emprendedor, trabajó mucho tiempo en una radio de barrio como operador y su pago era un espacio en la misma radio, resignaba su ganancia para destinarlo a algo que le causaba mucho placer, que era estar ante el micrófono de una radio. A diferencia de muchos de sus colegas que hoy lo recuerdan con dolor, lo conozco hace relativamente muy poco, exactamente desde septiembre de 2008 cuando el amigo Marcelo Borelli me llama para integrar un proyecto radial y posteriormente televisivo que trataba de rock nacional y promoción a bandas locales. Por supuesto con semejante temática, no podía negarme y acepte. Me lo presentan como un colega judicial, al tiempo me fui enterando del resto de sus actividades posteriores. Y que decir, excelente coequiper. Me causaba mucho asombro la energía y el compromiso que ponía a este proyecto que no le dejaba medio centavo, para darle difusión a rock local. Después llegaron los viajes, los premios, llegó el bendito programa de tv que nos tenia trabajando 7 días a la semana.. en fin, pude compartir un montón de cosas con él. Los éxitos, el reconocimiento, las desilusiones con las cosas que no salían, en fin. Tantas cosas. Si hay algo que caracterizó a Darío es su capacidad de superación. Nunca se dormía en los laureles. Siempre seguía para adelante, hasta alcanzar sus metas. Buscando una foto para ilustrar la noticia de su partida, me di cuenta que siempre estaba acompañado de una cerveza o simil. Y si, fue una persona que disfrutaba de la vida, sin importar el día y la hora, acompañado de alguna bebida, nunca se privaba de un asado con amigos o al menos, algo para picar. Ya sea para festejar algo o las largas horas de edición que nos llevaba vagabundos tv. Pareciera ser que sabía que la muerte lo iba a llevar joven y por eso aprovechaba cada día a pleno. Hoy me toca suceder a un grande, a un tipo que peleó siempre por lo que quería sin importar las barreras. Vagabundos sigue, no se si con el mismo nombre pero si con la misma temática: El apoyo incondicional a las bandas de rock locales. Ese era su sueño, su meta, su objetivo. Hoy el rock te llora, pero mañana te va a recordar como el buen tipo que eras y se que desde arriba me vas a estar guiándome, asintiendo con la cabeza o con el pulgar arriba cuando las cosas se hacen como vos las habrías hecho, o sea, de la manera correcta. Lo ultimo que te quiero decir es gracias, como siempre me despedia en el programa, gracias por darme el placer de hacer una de las cosas que mas me gustan en la vida, gracias por enseñarme, porque de vos aprendí un montón y gracias por tu onda por que sin vos, todo lo que logró Vagabundos no habria sido posible. Seguramente ya vas a estar muy comodo ahí arriba, seguro que primero unos mates con tu viejo que no veías hace mucho, charlando de política o de futbol. Después una pasada por un bar sentado en la misma mesa que Federico Mouras y Miguel abuelo charlando de rock de los 80. Un buen reventón punk con Ricky Espinoza y por ultimo unas cuantas cervezas junto a Pappo. Te vamos a extrañar, Dari, siembre te vamos a llevar a donde vayas recordandote. QUE SEA ROCK!!!
Diego Gomez Vallejos